ESE ORO AZUL QUE SE NOS ESCAPA ENTRE LOS DEDOS
Dicen que: “nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde”
Hace algunos años Talara la hermosa ciudad del desierto no solo era una ciudad bella, limpia y ordenada también era una ciudad con servicios públicos óptimos como el del agua potable y alcantarillado, algunos recuerdan que tuvimos hasta agua fluorada en las cañerías para evitar las caries; el servicio de agua potable era permanente.Hoy la realidad es otra muy diferente.
Distritos productores de petróleo como El Alto no cuentan con este servicio básico en sus casas desde hace 25 años. El gobierno distrital de turno hace esfuerzos por recuperar este vital servicio con un costoso proyecto que ha culminado su primera fase;el agua llega por el eje Paita –Talara a sus tanques de almacenamiento y luego la sufrida población alteña tiene que esperar una cisterna que llena sus cilindros fuera de la casa a un costo de 3 soles cada uno, el agua por redes a domicilio parece un sueño esquivo para este pueblo.
En otras zonas de la provincia el servicio de agua potable se da por horas y solo tres veces por semana; esto si no surge ningún problema con el eje Paita-Talara declarado recientemente en emergencia.Los problemas de los servicios de agua potable son deficientes en general en muchas partes del departamento, del país y del mundo y las razones de los mismos son diversas. Al poblador le interesan las soluciones pero estas vienen disfrazadas de demagogia en tiempos de elecciones y luego se convierten en olvido de mentirosos.
El presidente García estuvo en Talara y ante el reclamo popular por la falta de agua para salir del paso responsabilizó a la Empresa Petroperu para que de inmediato asuma como parte de su responsabilidad social la solución integral al problema en Talara.
Los gobiernos con visión de futuro tendrán que prestar atención prioritaria a este problema; habrá que facultar a los municipios para que dejen de destinar el canon petrolero y otros recursos solo a la construcción de “vereditas” que a la vuelta del siguiente gobierno o del siguiente fenómeno natural desaparecerán y en su lugar priorizar proyectos macro para solucionar este largo reclamo de un pueblo que aporta al erario nacional con creces y que a cambio adolece del básico de sus servicios.
Mas sobre problematica del agua en Talara en : http://www.elcomercio.com.pe/edicionimpresa/Html/2008-05-05/talara-sufre-pesimo-servicio-agua-potable.html)
El agua es considerada un bien social, sin embargo en el mundo 1,500 millones de personas no pueden gozar de este derecho al agua; se calcula que para el año 2025 el aumento de la demanda de agua será del 56% entonces dos de cada tres personas vivirán en condiciones de conflicto por el agua.
Los científicos alertan sobre el calentamiento global, que ya está trayendo profundos impactos negativos tanto en la deglaciación de los casquetes polares de las cumbres de la montaña andina como en las cuencas de la costa peruana que esta disminuyendo la disponibilidad para el abastecimiento de agua potable en las grandes ciudades.La deglaciaciòn en el Perú iría de 2,000km cuadrados de glaciales en 1987 a 0 Km en el 2025.
Datos dramáticos y preocupantes.
¿Podremos frenar el calentamiento global y la falta de agua en el mundo?
Al parecer es posible, solo hace falta que nuestros gobernantes se pongan de acuerdo para frenar la emanación de gases tóxicos que amenaza con hacer colapsar el planeta; hace falta anteponer el principio de la vida a los principios políticos y a los intereses económicos; tenemos no solo que firmar tratados internacionales de lucha a favor del medio ambiente, tenemos que cumplirlos.
¿Y nosotros? ¿Que debemos hacer?
Amigo, amiga lectora no podemos quedarnos de brazos cruzados tenemos que hacer nuestra parte, tomar nuestro remo y ayudar a darle un giro a este barco vikingo que va directo a una cascada donde solo encontrará destrucción.Los medios de comunicación deben continuar informando no solo sobre el presente engañoso del progreso; tenemos que hablar sobre el futuro incierto que ya no es solo una profecía, ahora es un dato científico.
Los ciudadanos tenemos que vigilar a nuestros gobernantes que olvidan porque y para que los elegimos; luego hasta se atreven a decir que nuestro amo es algún hortelano; esto a razón de alguna voz de protesta por estar en desacuerdo con algunos aspectos de nuestra democracia gubernamental.Hay que estar vigilantes para defender nuestro derecho al agua.
El agua debe continuar siendo un bien público y debe ser protegida desde sus cuencas.
Interesémonos entonces por cuidar ese oro azul que todos los días se nos escapa entre los dedos:En la ducha, en el en el jardín que se riega a horas inapropiadas, en regar una pampa árida; este oro azul que arruinamos al arrojar en el mar o cerca al mar nuestra basura.
Con nuestra indiferencia también dejamos escapar la posibilidad de cambiar la historia del mundo, es tiempo de preservar nuestro oro azul; por nosotros y por las generaciones que vendrán.
Acaso ¿no nos damos cuenta que nuestro verdadero hogar no son esas cuatro paredes que nos rodean? nuestro verdadero hogar realmente es nuestro planeta y nuestro alimento principal EL AGUA; cuidémosla, defendámosla.
Para el 2025 tendré 60 años y es triste saber que alguna guerra o conflicto por el agua estará sucediendo en el mundo, en mi país o en mi ciudad, guerra que en mi niñez tan solo fue el argumento de una serie de ficción (MAD MAX) ficción que para algunos de mis nietos tal vez sea un drama cotidiano. Hagamos lo posible y lo imposible por evitarlo.
Trama de la serie de TV de los 70 (MAD MAX)
En el desierto un grupo de personas defiende su reserva de agua a mano armada; mientras algunos vigilan el horizonte una abuela conversa con su nieto:
Abuela: “Cuando era niña solíamos bañarnos con el agua”
Nieto: (con ojos de asombro) “¿Te bañabas con el agua abuela?” ¡No puede ser!”
Abuela: “Si hijo, la vida era tan diferente hace algún tiempo…”
Dicen que: “nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde”
Hace algunos años Talara la hermosa ciudad del desierto no solo era una ciudad bella, limpia y ordenada también era una ciudad con servicios públicos óptimos como el del agua potable y alcantarillado, algunos recuerdan que tuvimos hasta agua fluorada en las cañerías para evitar las caries; el servicio de agua potable era permanente.Hoy la realidad es otra muy diferente.
Distritos productores de petróleo como El Alto no cuentan con este servicio básico en sus casas desde hace 25 años. El gobierno distrital de turno hace esfuerzos por recuperar este vital servicio con un costoso proyecto que ha culminado su primera fase;el agua llega por el eje Paita –Talara a sus tanques de almacenamiento y luego la sufrida población alteña tiene que esperar una cisterna que llena sus cilindros fuera de la casa a un costo de 3 soles cada uno, el agua por redes a domicilio parece un sueño esquivo para este pueblo.
En otras zonas de la provincia el servicio de agua potable se da por horas y solo tres veces por semana; esto si no surge ningún problema con el eje Paita-Talara declarado recientemente en emergencia.Los problemas de los servicios de agua potable son deficientes en general en muchas partes del departamento, del país y del mundo y las razones de los mismos son diversas. Al poblador le interesan las soluciones pero estas vienen disfrazadas de demagogia en tiempos de elecciones y luego se convierten en olvido de mentirosos.
El presidente García estuvo en Talara y ante el reclamo popular por la falta de agua para salir del paso responsabilizó a la Empresa Petroperu para que de inmediato asuma como parte de su responsabilidad social la solución integral al problema en Talara.
Los gobiernos con visión de futuro tendrán que prestar atención prioritaria a este problema; habrá que facultar a los municipios para que dejen de destinar el canon petrolero y otros recursos solo a la construcción de “vereditas” que a la vuelta del siguiente gobierno o del siguiente fenómeno natural desaparecerán y en su lugar priorizar proyectos macro para solucionar este largo reclamo de un pueblo que aporta al erario nacional con creces y que a cambio adolece del básico de sus servicios.
Mas sobre problematica del agua en Talara en : http://www.elcomercio.com.pe/edicionimpresa/Html/2008-05-05/talara-sufre-pesimo-servicio-agua-potable.html)
El agua es considerada un bien social, sin embargo en el mundo 1,500 millones de personas no pueden gozar de este derecho al agua; se calcula que para el año 2025 el aumento de la demanda de agua será del 56% entonces dos de cada tres personas vivirán en condiciones de conflicto por el agua.
Los científicos alertan sobre el calentamiento global, que ya está trayendo profundos impactos negativos tanto en la deglaciación de los casquetes polares de las cumbres de la montaña andina como en las cuencas de la costa peruana que esta disminuyendo la disponibilidad para el abastecimiento de agua potable en las grandes ciudades.La deglaciaciòn en el Perú iría de 2,000km cuadrados de glaciales en 1987 a 0 Km en el 2025.
Datos dramáticos y preocupantes.
¿Podremos frenar el calentamiento global y la falta de agua en el mundo?
Al parecer es posible, solo hace falta que nuestros gobernantes se pongan de acuerdo para frenar la emanación de gases tóxicos que amenaza con hacer colapsar el planeta; hace falta anteponer el principio de la vida a los principios políticos y a los intereses económicos; tenemos no solo que firmar tratados internacionales de lucha a favor del medio ambiente, tenemos que cumplirlos.
¿Y nosotros? ¿Que debemos hacer?
Amigo, amiga lectora no podemos quedarnos de brazos cruzados tenemos que hacer nuestra parte, tomar nuestro remo y ayudar a darle un giro a este barco vikingo que va directo a una cascada donde solo encontrará destrucción.Los medios de comunicación deben continuar informando no solo sobre el presente engañoso del progreso; tenemos que hablar sobre el futuro incierto que ya no es solo una profecía, ahora es un dato científico.
Los ciudadanos tenemos que vigilar a nuestros gobernantes que olvidan porque y para que los elegimos; luego hasta se atreven a decir que nuestro amo es algún hortelano; esto a razón de alguna voz de protesta por estar en desacuerdo con algunos aspectos de nuestra democracia gubernamental.Hay que estar vigilantes para defender nuestro derecho al agua.
El agua debe continuar siendo un bien público y debe ser protegida desde sus cuencas.
Interesémonos entonces por cuidar ese oro azul que todos los días se nos escapa entre los dedos:En la ducha, en el en el jardín que se riega a horas inapropiadas, en regar una pampa árida; este oro azul que arruinamos al arrojar en el mar o cerca al mar nuestra basura.
Con nuestra indiferencia también dejamos escapar la posibilidad de cambiar la historia del mundo, es tiempo de preservar nuestro oro azul; por nosotros y por las generaciones que vendrán.
Acaso ¿no nos damos cuenta que nuestro verdadero hogar no son esas cuatro paredes que nos rodean? nuestro verdadero hogar realmente es nuestro planeta y nuestro alimento principal EL AGUA; cuidémosla, defendámosla.
Para el 2025 tendré 60 años y es triste saber que alguna guerra o conflicto por el agua estará sucediendo en el mundo, en mi país o en mi ciudad, guerra que en mi niñez tan solo fue el argumento de una serie de ficción (MAD MAX) ficción que para algunos de mis nietos tal vez sea un drama cotidiano. Hagamos lo posible y lo imposible por evitarlo.
Trama de la serie de TV de los 70 (MAD MAX)
En el desierto un grupo de personas defiende su reserva de agua a mano armada; mientras algunos vigilan el horizonte una abuela conversa con su nieto:
Abuela: “Cuando era niña solíamos bañarnos con el agua”
Nieto: (con ojos de asombro) “¿Te bañabas con el agua abuela?” ¡No puede ser!”
Abuela: “Si hijo, la vida era tan diferente hace algún tiempo…”
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